La Viceministra de Pensiones y Servicios Financieros, Ivette Espinoza, informó el miércoles que se buscan mecanismos para evitar afectar a los prestatarios y al sistema financiero, tras concluir el diferimiento de pago de créditos que fue aplicado por la anterior administración debido a los efectos del COVID-19.
La autoridad, si bien dijo que se «está analizando» la ampliación del diferimiento de pago de créditos, consideró que esa «no ha sido la mejor medida» e indicó que no está adecuada porque -a su juicio- «hay personas o empresas grandes que durante este tiempo han generado ingreso y tampoco han pagado».
«Entonces todos esos aspectos se los están viendo, obviamente, y se establecerán medidas que permitan en este tiempo, antes del 1 de enero, a que se puedan tomar estas medidas para que no afecte ni a los prestatarios ni al sistema financiero», dijo en una entrevista con el canal RTP.
Afirmó que el objetivo es encontrar medidas que coadyuven a los prestatarios y garanticen la solvencia y estabilidad del sistema financiero.
Además, Espinoza recordó que el sistema financiero o la banca evalúa la capacidad de pago de los prestatarios para dar posibilidades a sus clientes en el pago de créditos, ya que el nuevo perfil de riesgo es diferente al que se tenía antes y durante la cuarentena por el COVID-19.
La semana pasada, diferentes sectores, entre ellos choferes, gremiales y microempresarios, solicitaron al Gobierno la posibilidad de ampliar el diferimiento de créditos, ya que la economía aún no se reactivó del todo por efectos de la cuarentena, que fue establecida por la pandemia del COVID-19