En un trabajo de investigación desarrollado por Fabricio Alejandro Machicado Borja, bajo el título: Modelo de Empresa Comunitaria en el Desarrollo Productivo, señala que en la estructura económica en Bolivia que responde al sistema capitalista, se han identificado cuatro formas de organización de la economía: forma comunitaria, forma estatal, forma privada y forma social cooperativa.
Las tres últimas mencionadas, tienen un amplio basamento jurídico -institucional y tienen el impacto factible en el Producto Interno Bruto en los procesos de crecimiento y desarrollo de la economía nacional; se alude a la obra de Francis Fukuyama, “El fin de la historia y el último hombre”, por el que se deduce que, una vez eclosionado el Sistema Socialista, el Sistema Capitalista sería la única y ultima forma de organización económica de la humanidad.
Sin embargo, la primera: comunitaria, no ha merecido hasta el momento la estructuración de un tejido epistemológico, ni la propuesta de un modelo econométrico para insertarse en estos procesos. La forma de organización económica comunitaria, no obedece solamente a criterios de orden histórico, ideológico o político, como equivocadamente se la identifica, por la mala utilización del concepto comunitario, que, por el contrario, tiene muchas acepciones y significados desde el punto de vista etimológico, en los ámbitos económico, social, político, cultural, etc.
Algunos principios de esta forma de organización económica comunitaria, provienen del trabajo comunitario, que pervive actualmente en nuestro país, particularmente en tierras altas, donde se practica la reciprocidad, la identidad, la colaboración, etc., en los marcos de un trabajo colectivo. Estos principios sirven para la estructuración de la propuesta de Empresa Económica Comunitaria, pero en una acepción de integración en los procesos de crecimiento y desarrollo económico.
La forma de organización económica comunitaria, es una de las alternativas,al igual que las otras: la privada, la pública y la social cooperativa; de lo que se trata es entonces, de dotarle dice el autor, del presupuesto teórico, técnico y modélico, para su ejecución con sus propias características y autonomía, frente a las demás;toda vez que su existencia no sistematizada desde el punto de vista académico, es una realidad en el contexto económico y social de nuestro país.
Si la Forma de Organización Económica Comunitaria, es una realidad en el contexto nacional, además de estar reconocida al interior del sistema capitalista, es factible demostrar su viabilidad, mediante la propuesta de constitución de empresas económicas comunitarias,en los diferentes sectores, indica la investigación al que tuvo acceso CalleBolibia.
Por lo tanto, la forma de organización comunitaria, hace referencia al trabajo en sociedad o asociación y en forma colectiva, con sus propios significados y acepciones incluidos los estratégicos y de industrialización, con el objetivo de su incidencia en el desarrollo económico.
Según el investigador, esta es una de las maneras de enlazar la economía con los intereses sociales, donde se han identificado los preceptos epistemológicos cualitativos y económicos cuantitativos, para el enriquecimiento teórico de la Forma Económica Comunitaria y la estructuración de empresas económicas comunitarias, para insertarlos en los procesos de desarrollo económico.
Indica Machicado Borja, que se ha demostrado que el factor fuerza de trabajo, en su carácter colectivo, tiene un rol importante en la creación de valor comunitario en las empresas económicas comunitarias y su incidencia en el desarrollo económico.
En todo caso, esta forma de producción económica, debe obedecer también a la planificación que el Estado, está en la obligación de plantear para los procesos de crecimiento económico.
Machicado Borja, concluye señalando que un adecuado modelo econométrico y parámetros para la estructuración de la forma de organización económica comunitaria y las empresas económicas comunitarias, son alternativas para su inserción en los procesos de crecimiento y desarrollo económico, considerando la constitución como unidad económica -social, asociatividad, solidaridad, autogestión, complementariedad, rentabilidad, reinversión comunitaria, reproducción del capital monetario, social y humano, financiamiento no tradicional, diversificación productiva, saberes, prácticas y tecnologías propias, economía sustentable y preservación del medio ambiente y la biodiversidad, progresividad, políticas económicas de economía solidaria a corto plazo.
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