En medio de las tensiones internas del Movimiento Al Socialismo (MAS) y con las elecciones de 2025 en el horizonte, el nombre de María Nela Prada, actual Ministra de la Presidencia, ha comenzado a sonar como posible acompañante de fórmula de Luis Arce. Aunque la propia ministra ha declarado que “no está pensando en candidaturas”, la mención de su candidatura podría ser un globo de ensayo del sector «arcista» para medir reacciones y consolidar su proyecto político.
Prada, quien acompaña a Arce desde el inicio de su gestión en noviembre de 2020, ha sido una figura clave en el gobierno, destacándose como articuladora entre ministerios y defensora de la estabilidad económica promovida por el presidente. Sin embargo, su desempeño no ha estado exento de críticas, especialmente desde el ala «evista» del MAS, liderada por Evo Morales. Este sector la ha acusado de representar una «derechización» del partido, señalando sus raíces familiares —ligadas a Hugo Banzer— y su papel en las pugnas internas como intentos de marginar a Morales.
La hipótesis de un globo de ensayo cobra fuerza en el actual contexto político. Con Arce ratificado como candidato por sus seguidores en octubre de 2024, la elección de un vicepresidenciable sigue siendo un tema abierto. Proponer a Prada, una figura joven, leal y con visibilidad, podría ser una estrategia para renovar la imagen del MAS sin romper con la línea del presidente, al tiempo que se evalúa su aceptación entre las bases y las organizaciones sociales. Sin embargo, también pone a prueba la reacción del sector evista, que ya ha mostrado rechazo hacia ella y podría intensificar su discurso de «traición ideológica» si el rumor toma vuelo.
Analistas sugieren que esta movida podría tener un doble propósito: fortalecer al arcismo frente a las elecciones y, al mismo tiempo, desviar la atención de desafíos como la economía o el conflicto interno con Morales. La respuesta de Prada, negando ambiciones electorales, deja espacio para maniobrar: si el respaldo crece, podría reconsiderarse; si la resistencia domina, el arcismo podría replegarse sin mayores costos.
Por ahora, el MAS sigue navegando en aguas turbulentas, y el nombre de María Nela Prada, intencional o no, ya está generando debate. ¿Un globo de ensayo exitoso o un nuevo frente de confrontación? El tiempo y las bases lo dirán.
Redacción central

 
                
