Mientras la ciudad se inunda de basura en diferentes zonas y mercados populares como la Cancha, Calatayud y otros, por la ocurrencia de padres de familia de la zona sud que no permiten el ingreso de los carros basureros, nadie toma una iniciativa para buscar una solución.
Está por demás decir que ni la gobernación tampoco la alcaldía hacen alguna gestión para revertir y evitar el daño ambiental y a la salud de los habitantes.
A la negligencia de las instituciones señaladas, se suma el ministerio Público que ante una situación que afecta a la población y se encuentra tipificada en el ordenamiento legal como delito, no actúa de oficio para que se sancione a los responsables.
Y, los dirigentes de Kara Kara, satisfechos con la medida afectando a la salud, pretenden lograr el desayuno escolar que les corresponde pero que la responsable es la comuna y no la población.
Además el sector de Kara Kara a vista y paciencia de las autoridades, bloquean cualquier rato que se les ocurra so protexto para que sus demandas sean atendidas, sin olvidar que los asentamientos en esa zona fueron ilegales con la complicidad municipal.
Con agencias