El expresidente Evo Morales cuestionó la coherencia ideológica del mandatario Luis Arce Catacora, acusándolo de traicionar los principios antiimperialistas del Movimiento al Socialismo (MAS). Según Morales, Arce no asistió a la asunción presidencial de Nicolás Maduro en Venezuela como lo hicieron otros líderes de izquierda, lo que refleja su distanciamiento de los gobiernos progresistas de la región. Además, denunció supuestos acuerdos políticos entre Arce y opositores como Fernando Camacho y Carlos Mesa, a quienes calificó de ser parte de una «troika neoliberal».
Morales también afirmó que el gobierno de Arce permite la injerencia de organismos estadounidenses como la DEA y la USAID, señalando su presunta presencia clandestina en la lucha contra el narcotráfico y en la Cancillería boliviana. Acusó al presidente de alinearse con intereses extranjeros al felicitar a Donald Trump y recibir respaldo de la embajada norteamericana, algo que, según Morales, contradice los principios de un gobierno de izquierda. Estas acciones, agregó, evidencian una recolonización del país que va en detrimento de las políticas soberanas impulsadas durante su gestión.
El líder cocalero criticó además la respuesta del gobierno de Arce frente a las demandas sociales, asegurando que se criminalizan y persiguen las protestas de sectores vulnerables que denuncian el hambre, el desempleo y la destrucción económica. Morales enfatizó que estas políticas no solo marginan al pueblo, sino que afectan especialmente a los sectores indígenas, quienes habían sido el pilar fundamental del proyecto político del MAS. Según el exmandatario, Arce estaría ejecutando un plan que traiciona los principios fundacionales del partido, alineándose con el neoliberalismo y el imperialismo internacional.
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