Evo Morales enfrenta el Carnaval atrincherado en el Trópico mientras el arcismo exige su captura
En medio del ambiente festivo del Carnaval, Evo Morales permanece resguardado en el Trópico de Cochabamba, su bastión político, bajo la protección de organizaciones sindicales que han reforzado su seguridad ante la amenaza de una orden de aprehensión. Mientras el diputado arcista Rolando Cuéllar exige el despliegue del Ejército para su detención, el Gobierno de Luis Arce enfrenta un dilema: intervenir y arriesgar una escalada de violencia o mantenerse al margen y dar pie a críticas de inacción.