El presidente Luis Arce Catacora destituyó de manera inmediata al ministro de Medio Ambiente y Agua, Alan Lisperguer, luego de que se hiciera pública la admisión de una denuncia en su contra por presunto enriquecimiento ilícito. La decisión fue anunciada por el mandatario, quien subrayó que su gobierno no tolerará ningún indicio de corrupción y confía en que la justicia llevará a cabo una investigación exhaustiva sobre el caso. Lisperguer, ahora exministro, deberá asumir su defensa en las instancias correspondientes para esclarecer los hechos.
La denuncia en cuestión señala un presunto incremento desproporcionado en el patrimonio de Lisperguer, incluyendo la omisión de ocho inmuebles en su declaración jurada de bienes. Según informes preliminares, la Fiscalía abrió una investigación formal tras encontrar indicios suficientes que justificaron la admisión del caso. Este hecho ha generado críticas en la opinión pública y reacciones desde diferentes sectores políticos, quienes exigen transparencia y celeridad en el proceso judicial.
La destitución de Lisperguer se enmarca en el compromiso del gobierno de Luis Arce de combatir la corrupción y promover la transparencia en la administración pública. Este caso se suma a otros episodios recientes que han puesto a prueba la capacidad del sistema judicial para actuar con independencia y firmeza. La decisión del presidente de apartar a Lisperguer busca reforzar la credibilidad del Ejecutivo y enviar un mensaje claro de que ningún funcionario está por encima de la ley.